PLANTAS MEDICINALES Y SUS BENEFICIOS
MELISA:
Si no eres un "operado de los nervios", puede que esta sea la planta que te ayude a serlo. El toronjil se emplea frecuentemente en infusiones de relajación, contra la ansiedad y depresión, además de actuar como sedante y protector de la memoria. Se usa para reanimar desmayos, en problemas cardíacos como palpitaciones, para calmar los nervios y angustias, y dolores de cabeza.
Atención: Su uso no se recomienda en menores, embarazadas, mujeres en período de lactancia ni personas con tratamiento de hormonas tiroideas.
Preparación: echar una cucharada de la hoja en un litro de agua hervida y se toma hasta tres veces al día.
MANZANILLA:
Una de las mejores amigas del sistema digestivo: Ayuda a combatir los trastornos intestinales, gastritis, úlceras gastroduodenales, vómitos y digestiones lentas, muy adecuada para el dolor de estómago. Además, aumenta la secreción de bilis, protege el hígado, es diurética, antiulcerosa y alivia los dolores de la menstruación. Por su contenido de aceite esencial, ayuda también a cicatrizar y desinfectar heridas, al tener una acción antibiótica, antimicrobiana y contra los hongos. También ayuda frente a cuadros nerviosos.
La medicina tradicional ha empleado la camomila como antiinflamatorio, sedante e, incluso, contra las úlceras estomacales durante siglos. Hace poco un estudio británico dio con cuál era la gracia de sus propiedades: Eleva los niveles de dos sustancias (la glicina y el hipurato) que son relajantes musculares y nerviosos.
MENTA:
El mentol tiene propiedades como antiséptico natural de tipo intestinal y anestésico, ayuda a eliminar el mal aliento. Evita la formación de gases en el estómago. Se usa en dolores reumáticos y musculares, afecciones respiratorias (resfríos, gripes, bronquitis y sinusitis). La esencia de menta es estimulante del sistema nervioso, siendo ingerida usualmente como té o gotas.
El Centro Nacional de Medicina Complementaria y Alternativa (NCCAM), dice que no hay pruebas que sustenten propiedades antipiréticas o antiinflamatorias del aceite de menta. Las pruebas científicas que sustentan posibles mejoras en las molestias digestivas son preliminares.
Atención: Es importante no usarlo en menores de dos años, personas con cálculos biliares y mujeres que amamantan, ya que podría reducir el flujo de leche.
MATICO:
Dicen que debe su nombre a un soldado español, que usó la planta para calmar una hemorragia y salió airoso de la situación. Es un poderoso cicatrizante en todo tipo de heridas, tanto internas (úlceras digestivas, disfunción hepática) como externas (cortes en la piel). Además de ser un buen analgésico, combate los hongos.
La evaluación farmacológica de extractos seriados obtenidos a partir de las hojas ha permitido demostrar las propiedades antiinflamatorias vía oral y tópica, analgésica vía oral, cicatrizante y antioxidante de los extractos hexánico, de diclorometano y metanólico, resultando más activos los dos últimos.