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En esta época, algunas recomendaciones son evitar la exposición a las bajas temperaturas, hacer ejercicio y vacunarse.
El invierno es uno de los grandes enemigos de los adultos mayores, ya que se asocia a una serie de riesgos para este grupo etario: aumentan las probabilidades de resfriarse y las opciones de realizar actividades al aire libre disminuyen.
El doctor Eric Blake, jefe del Servicio de Geriatría de Clínica Alemana, entrega aquí algunos consejos para pasar un invierno sin sobresaltos.
Contagios Es importante prevenir la influenza cuidando los hábitos de higiene, evitando estar en locales cerrados y con poca ventilación. Está comprobado que la vacuna anti-influenza es la mejor prevención porque reduce las posibilidades de desarrollar la enfermedad en 75% y la hospitalización hasta un 70% por lo que es importante vacunarse todos los años ya que el virus va cambiando.
Alimentación Esta es una de las claves de una vida saludable. Las frutas y verduras, los alimentos bajos en grasas y un adecuado consumo de pescado contribuyen al bienestar. Esta época es perfecta para incrementar la ingesta de cítricos como la naranja y el limón, ricos en vitamina C.
Bajas temperaturas Además, debido a las bajas temperaturas es importante abrigarse bien, no exponerse al frío y hacer ejercicios físicos para que mantenerse activo y con una temperatura adecuada.
Hidratación Si bien es fundamental estar hidratado, el especialista pone énfasis en evitar el exceso de té y café porque tienen efecto diurético, lo que hace perder líquido. Además, este último es más estimulante, lo que puede dificultar el sueño, lo que es complicado si se considera que ya muchos adultos mayores tienen problemas para dormir.
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