La depresión es una enfermedad mental. Es un trastorno del estado de ánimo en el cual los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante semanas o por más tiempo.
La depresión en los adultos mayores es un problema generalizado, pero no es una parte normal del envejecimiento. Con frecuencia, no se reconoce ni recibe tratamiento.
Causas
En los adultos mayores, los cambios en la vida pueden incrementar el riesgo de depresión o llevar a que la depresión existente empeore. Algunos de estos cambios son:
Mudanza del hogar, como por ejemplo a un centro de la tercera edad
Dolor o padecimiento crónico
Hijos que dejan el hogar
Cónyuge y amigos cercanos que mueren
Pérdida de la independencia (por ejemplo, problemas para cuidarse sin ayuda o movilizarse, o pérdida de los privilegios para conducir)
La depresión también puede estar relacionada con un padecimiento físico, como:
Trastornos tiroideos
Mal de Parkinson
Enfermedad del corazón
Cáncer
Accidente cerebrovascular
Demencia (como mal de Alzheimer)
El consumo excesivo de alcohol o de determinados medicamentos (como los somníferos) puede empeorar la depresión.