La investigación sobre redes sociales de apoyo en general llega a una conclusión de gran relevancia: las redes sociales de apoyo son estrategias que utilizan las personas para obtener o mantener ciertos beneficios en su calidad de vida. Aplicándose a grupos vulnerables de discapacitados, mujeres, familias, adultos mayores, pobres, entre otros, la evidencia es irrefutable. Pero también lo es cuando se aplica a grupos mejor ubicados en la estructura social (profesionistas, comunidades científicas, hombres de negocios, entre otros). De hecho todos estamos inmersos en múltiples redes sociales, muchas de ellas de apoyo efectivo. Desde el nacimiento y durante todo el curso de vida pasamos de unas redes a otras, estas forman parte crucial de nuestro desarrollo (Hogan, 1993 y 1995). Muchas de estas redes caminan paralelamente a las instituciones que regulan nuestro tránsito en la sociedad. Si bien su importancia no se puede estimar superior a la de la familia residencial, lo cierto es que los individuos como las familias están conectados a múltiples redes sociales sean en forma individual como grupal. Jay (1964: 58; citado en Rosemberg, 1982) ha mencionado que las redes no sólo son formadas por individuos sino también por familias, comunidades u otros agregados sociales.
FUENTE: http://envejecimiento.sociales.unam.mx/articulos/LibroRedes.pdf