Las relaciones sociales brindan un importante soporte cuando se busca satisfacer la necesidad de estar acompañado, estar cuidado, tener ayuda, enseñar destrezas a otros; etc. Se denomina al producto de una adecuada interacción y de calidad recurso; que resulta de suma importancia, especialmente al tratarse de un tipo de recurso que es improbable de obtener de otro modo que no sea socializando. Así, la ayuda mutua entre las personas genera protección social, y, por lo tanto, las relaciones sociales son fundamentales para el bienestar de las personas (Del Valle y Coll, 2011).
Aunque cabe recordar que, aunque los contactos sociales suelen tener un impacto positivo, también pueden tener un severo impacto negativo, pudiendo llegar a causar malestar y daño a la persona aludida.
En especial, al tratar sobre el apoyo social y su importancia en el envejecimiento, éste trae múltiples beneficios para los adultos mayores: preserva al sujeto de los posibles cambios negativos en su salud (física y mental), ya que promueven la adaptación y flexibilidad de pensamiento en los adultos mayores. Las relaciones de apoyo fomentan, desarrollan y ayudan a mantener la percepción y sentido de control de un individuo, lo cual puede minimizar la pérdida de roles que ocurre con el envejecimiento y ayudar a generar conductas dirigidas a compensar la pérdida de ellos. Es un factor importante dentro del concepto de bienestar y el envejecimiento satisfactorio y un facilitador de las conductas de promoción de la salud; llegando a disminuir el riesgo de mortalidad e internamiento.
FUENTE: http://adultosmayoreshoy.blogspot.com/2015/05/la-importancia-del-apoyo-social.html